Tipos de botellas de vino: Medidas, diámetro, altura…

¿Conoces los diferentes tipos de botellas de vino? ¿Estás buscando saber cuáles son las medidas, dimensiones y altura de una botella de vino?

Ya sea funcional o estético, el arte se cuela en las botellas de vino de distintas modalidades y variedades. La capacidad o tamaño de la botella, la forma, el contenido, el vidrio, el color, el aspecto de sus curvas...

Todo tiene su explicación logística, pero además también obedece a estrategias de marketing creadas por verdaderos artistas  para distinguirlas del resto y presentarlas como auténticos objetos de deseo. Si bien ya te contamos en otros artículos cómo se hace el vino,  cómo conservar el vino abierto o qué son los taninos del vino, ahora te contamos todo sobre los diferentes tipos de botellas de vino.

Tipos de botellas de vino según su forma

La forma de la botella tiene su sentido. Su formato identifica la procedencia e incluso el tipo de bebida que atesora, pero también la más clásica tiene un sentido funcional.  El vino evoluciona mejor en ausencia de aristas y esquinas en la botella. Eso explica el porqué de algunas vasijas con hombros elegantes y erguidos y otras con cuellos súper largos, por ejemplo.

Las diferentes formas que podemos observar en las botellas de vino tienen un nombre asociado para referirse a ellas que proviene del lugar dónde se comenzó a usar. Por ello, la referencia que debemos tomar para que no se nos olvide el nombre es ésta: su origen. En base a su forma, con sus diferentes medidas y diámetros, podemos distinguir en general los siguientes tipos de botellas de vino:

Botella bordelesa

Medidas y Diámetro: 27.9 cm. y 7.66 cm.

Origen del nombre: Burdeos

Originaria de la región de Burdeos (Francia), este tipo de botella es uno de los más clásicos y el más utilizado en todo el mundo. De forma cilíndrica, hombros marcados y fondo cóncavo, su color habitual es el verde, tono que favorece la protección del vino durante su reposo.

Suele contener vinos tintos y es la botella más fácil de guardar en casa y en vinotecas. Las hay de varios tipos: estándar o ligera, reserva, élite o cilíndrica alta y con cierre Stelvin, para las que sustituyen el corcho por los tapones metálicos de rosca.

Al principio estaba destinada a aportar el toque final a los caldos procedentes de uvas Cabernet Sauvignon, Merlot o Cabernet Franc, pero ahora mismo es fácil encontrarla con otras variedades, siendo muy típica, por ejemplo, en los tempranillos españoles.

La Botella Provenzal es una botella similar en tamaño a la bordelesa, aunque posee un estrechamiento que facilita su manipulación a la hora de manejarla para servir.

Botella borgoñesa

Medidas y Diámetro: 28.7 cm. y 80.5 cm.

Origen del nombre: Borgoña, región francesa

De todos los tipos de botella de vino, es la botella más antigua que se conoce para el vino y suele guardar tintos de crianza. Con un diseño francés parecido al de la botella bordelesa, mantiene una ligera curva en los hombros, pero estéticamente más ancha que las botellas de tipo Rhin y más corta que las Bordelesas.

Se fabrica en tonos verdosos o pardos y también las hay de varios tipos. Los más habituales son Borgoña cóncava y Borgoña convexa. Algunos modelos recuerdan a los usados para cavas y espumosos. Hoy en día algunos la usan para otorgar cierta diferenciación a sus vinos y por eso también es fácil verla en vidrio transparente.

En España este tipo de botellas era fundamentalmente utilizado para garnachas, así como para algunas zonas del noroeste (Galicia, Bierzo), si bien es cierto que a día de hoy su uso se está extendiendo por otras muchas regiones.

Botella Rhin

Medidas y Diámetro: 35 cm. y 7.6 cm.

Origen del nombre: Proviene del río Rhin (Alemania).

También conocida como renana o alsaciana, recibe su nombre por su origen alemán. Es mucho más esbelta que las anteriores botellas citadas. Alta y alargada, dibuja apenas una suave curva en sus hombros. En este caso, es más habitual que se use para vinos blancos o rosados. Se puede ver en tonos verdes, transparentes e incluso tonos bastante atrevidos, como azules o caramelo.

Botella Franconia

Medidas y diámetro: 22 cm y 15 cm.

Origen del nombre: Zona vinícola de Alemania.

Es la botella con la forma más diferente respecto al resto, ya que es aplanada y no cilíndrica.

Botella Jerezana

Medidas y diámetro: 28.6 cm y 7.5cm

Origen del nombre: Jerez de la Frontera (Cádiz)

Este modelo podría confundirse por su parecido con la Bordelesa, salvando ciertas diferencias. Se trata de un diseño español, de hombros más marcados y cuyo cuello no es cilíndrico, sino que se ensancha en la base. Normalmente, es una botella opaca y su color más característico es el negro o casi negro. Contiene vinos finos, de Jerez y manzanillas.

Botella Cava o Champagne

Medidas y diámetro: 30 cm y 8.84 cm.

Origen del nombre: Champagne-Ardenne (Ciudad Francesa)

De hombros caídos y tonos verdes, aunque no es difícil encontrarla en otros colores,  es parecida a la botella Borgoña con pequeñas variaciones.

Posee siempre paredes mucho más gruesas, puesto que la botella tiene que resistir la presión interior de las burbujas de los vinos espumosos y con una oquedad característica en su base, de nuevo para aligerar la presión del contenido.

Tipos de botella de vino según su tamaño

El tamaño es muy importante para la conservación del vino en el caso de los vinos tintos de guarda. Tiene una gran influencia en la conservación debido al impacto que el tamaño produce en la oxigenación y temperatura del caldo. A mayor tamaño, mejor evolución y mayor tiempo de guarda. Y esto es debido a que el vino en contacto con el vidrio y la entrada de oxígeno es menor en términos relativos que en una botella pequeña, lo que otorga una mayor longevidad del vino.

¿Cuáles son las medidas de una botella de vino?

El tamaño habitual de las botellas de vino es 75 cl. Hay diversas teorías sobre el por qué de esta cantidad, algunas hacen referencia a las ventajas de su comercialización o la cantidad exacta para mejorar el resultado.

No obstante, la más popular se refiere a su consumo, ya que en una cena para dos o tres personas estas botellas supone la medida justa. No obstante, hay tamaños más pequeños y más grandes.

Estos serían los diferentes tipos de botellas de menor a mayor tamaño. Cabe matizar que muchos de los tamaños (aquellos que se salen de las medidas habituales) sólo se encuentran en ciertas tiradas de algunos vinos concretos:

• 18cl: Cuarto de botella, Piccolo o Botella Benjamín.
• 37 cl: Media botella
• 50 cl: Frasca o Botella de medio.
• 62 cl: Botella Clavelín.
• 75 cl: Botella regular o estándar
• 150 cl: Botella Mágnum.
• 300 cl: Doble Magnun
• 450 cl: Botella Jeroboam.
• 600 cl: Botella Imperial.
• 600-640 cl: Matusalem.
• 900 cl: Salmanazar.
• 1.200-1.280 cl: Baltasar.
• 1.500-1.600 cl: Nabucodonosor.
• 1.800 cl: Salomón.

El color en los diferentes tipos de botellas de vino

Si bien la forma de la botella sí se puede considerar algo estético, el color del vidrio sí cumple una función importante ayudando a mejorar la conservación del vino y mantenerlo de forma adecuada para el momento óptimo de su consumo.

El color empleado en las botellas tiene una función protectora de la acción de la luz, conservando mejor el vino en su interior. El color más empleado es el verde, que repele radiaciones de la luz, pero podemos encontrar otros como negro, ámbar o transparente.

Los colores más oscuros se suelen usar en vinos de guarda (vinos que vayan a pasar mucho tiempo en botella). Por otro lado, las botellas transparentes se suelen usar para vinos de consumo más rápido, ya que el vidrio transparente hace que la bebida evolucione a más velocidad. Los vinos tintos rara vez van en botella transparente, sean jóvenes o no.

Los vinos jóvenes de consumo inmediato, tanto blancos como rosados, se embotellan en vidrio transparente para así dar protagonismo a su color brillante y vivo.