Avintura't Enoturisme

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13 bodegas y viñedos que visitar cerca de Barcelona.

27 de junio de 2021

Barcelona es un lugar donde es muy fácil poder encontrar cualquier cosa, pero lo difícil está en saber elegir los mejores sitios y planes. Por este motivo, vamos a exponer 13 bodegas de vino en Barcelona que no te puedes perder si eres un enamorado del sector vitivinícola. A la vez, veremos distintos viñedos en Barcelona y algunos de los mejores vinos catalanes. Asimismo, conocerás más sobre distintos sitios perfectos para hacer maridajes y catas de vinos.

1. Alella Vinícola

Nos encontramos con una historia llena de tradición, ya que es una de las marcas de las cooperativas vitivinícolas pioneras del siglo XX en la comunidad autónoma de Cataluña. En esta bodega se producía el vino blanco que los señores de Barcelona consumían desde 1906.

Alella Vinícola es muy importante en Alella, dado que es parte de su patrimonio histórico y sentimental. El vino que hacían ha sido reconocido internacionalmente y exportado a nivel mundial. Hablamos de una bodega modernista diseñada por un aprendiz de Antoni Gaudí. Unas de las ventajas de su ubicación son los 20km que le separan de la ciudad de Barcelona.

La familia Garcia adquirió la bodega en el 1998 para marcar un punto y seguido en la historia de la Cooperativa. De esta manera, recuperaron viñedos y vinificaciones olvidadas, por lo que devolvieron al pueblo vinos dulces y generosos. A la vez, ayudaron al avance de innovación e investigación de las bodegas, esto dió como resultado unas instalaciones muy modernizadas que mantenía, obviamente, la estructura y su especial esencia. Todo esto fue para así combatir de la mejor manera contra las plagas y enfermedades de la viña.

Por la mayoría de los territorios de la comarca del Maresme encontramos unas fabulosas vistas al mar mediterráneo y a la ciudad de Barcelona. Entre las tierras de Denominación de Origen como Alella, El Masnou, Teià y Tiana, encontramos terrenos arenosos, la Pasa Blanca y tanto Garnatxa blanca como tinta.

2. Avenc del Garraf

Lo curioso de esta bodega viene precedido por su nombre, “avenc”. Esto viene dado porque está situada en el Parque Natural del Garraf, donde podemos encontrar “avencs”, cavidades naturales que predominan por su verticalidad y, a veces, su gran inclinación. Esta palabra catalana tiene muchos sinónimos para referirse a una sima, por ejemplo: bòfia, canya, caricau, forat, grallera, bavorell, etc.

El proyecto de l’Avenc del Garraf surgió por la inquietud de dos farmacéuticos que elaboraban vinos en un garaje  y decidieron estudiar enología y llevarla a cabo. Al no ponerse límites no se encuentran en ninguna Denominación de Origen, además, lo que hacen son ediciones limitadas.

En lo que más destacan sus productos es el estilo de creación, ya que no se rigen por nada y se basa en el free style.

3. Avgvstvs Forvm

En este caso, nos encontramos en “El Vendrell”, la comarca del Baix Penedès para conocer Avgvstvs Forvm. Estos viñedos se plantaron en el 1982 a unos 3 km del mar. Más tarde, en los 90, cobró vida la bodega gracias a los magníficos resultados que consiguieron en las primeras microvinificaciones.

Con orgullo, podemos decir que es un sitio histórico, ya que en medio de las viñas antiguamente se ubicaba lo que había sido la Vía Augusta, es decir, aquel camino que conectaba Roma con las ciudades más destacadas del Mediterráneo.

Gracias a sus mejores racimos consiguen no estancarse en los vinos, dado que también elaboran vinagres agridulces. En esta bodega pequeña y familiar se empezó a poner en marcha por consumo propio. A medida que fue pasando el tiempo consiguió reconocimiento a partir de diferentes chefs de todo el mundo.

4. Parés Baltà

Seguidamente, dentro de las bodegas de vino en Barcelona, te contamos la historia de Parés Baltà, ya que es sorprendente debido a que la bodega cuenta con más de 200 años de antigüedad junto a una masía original que aún persiste desde 1790. Todo el complejo fue curiosamente construido en tres fases, la sala de barricas, una bodega anexada y la Cava.

Lo que más destaca de estas viñas es la biodinámica, dado que actualmente son pioneras por la agricultura ecológica que se implementó hace más de 40 años. Cabe decir que se nota como saben que está en el viñedo la calidad del vino. Vemos que es una bodega donde el papel de la mujer se presenta muy de cerca, y se expone en cada botella un cuidado y esencia muy especial.

5. Sumarroca

En las bodegas Sumarroca se nos presenta un seguido de adjetivos dignos de enumerar. Hablamos tanto de tradición vitivinícola como innovación, dado que se da un equilibrio gracias a la pasión y emoción que se da en el trabajo en las viñas.

Nos ubicamos en la comarca de Alt Penedès, donde se pretende dar un producto de alta calidad a través de carácter y personalidad. Se nos presenta un gran equipo de profesionales que, ante todo, quiere preservar una viticultura responsable y ecológica que fomenta la biodiversidad y la biodinámica. De esta manera, fue como se convirtieron en los pioneros de la zona en tratar, de manera natural, el carcoma de la planta.

6. Mas Rodó

Mas Rodó, es un proyecto que empezó en 2005 por una familia que consiguió que en 2010 saliera al mercado. Lo más importante para ellos es conservar la pasión y la ilusión por el vino.

Sus productos destacan la materia prima, los detalles y el trabajo que consiste en una buena utilización del conocimiento y la técnica. Todo esto se encuentra en altura, es decir, a unos 450 y 700 metros de altitud, ya que al estar en una zona interior montañosa sus vinos se llenan de personalidad.

Referente al entorno, cabe decir que impulsa lo ecológico que, gracias al terreno, se marcan líneas de trabajo que desbordan de cualidades privilegiadas. A su vez, los espacios que rodean a las viñas los calificamos como especiales, dado que son 30 hectáreas que se encuentran en medio del bosque perfectamente preparadas para un paseo o un tour. Perfecto para si quieres hacer una visita por bodegas de Barcelona.

7. Eudald Massana

En la comarca del Alt Penedès encontramos la historia de nueve generaciones dedicadas al vino y una masía con más de 300 años de antigüedad, bajo el nombre de Eudald Massana. Dentro de este recinto hay mucha historia sentimental. Por esta razón, vemos reflejado el compromiso y el esfuerzo constante en cada producto que ingerimos.

En este espacio de 30 hectáreas encontramos entre viña, cereal y bosque métodos tradicionales, identidad y perseverancia. Se presenta una agricultura que, gracias a la innovación, el trabajo y la armonía, se caracteriza especialmente por ser ecológica y biodinámica. Todo esto es gracias al respeto y pasión que se da en estos viñedos cerca de Barcelona, entre Subirats y Avinyonet.

Por tal de cuidar del ecosistema que lo rodea y conservar un equilibrio, los Massana, tratan de manera personalizada cada variedad de uva teniendo en cuenta sus necesidades. Para esto, disponen de una finca con microclimas, por lo que hace de cada metro cuadrado un mundo diferente.

8. Cuscó Berga

Nos volvemos a situar en el Alt Penedès, dónde encontramos en Grunyoles de Avinyonet del Penedès la familia Cuscó Berga. La historia vitivinícola y el consumismo del vino del lugar se remonta a la época de los fenicios. Eso sí, la bodega más nueva fue construida en el año 1985.

La finalidad de esta última bodega fue, en grandes rasgos, una modernización que no deja atrás esa tradición que han ido conservando y ha hecho que todo esto llegara tan lejos. Además de calidad también encontramos otras cualidades que tiene esta bodega, en concreto, las espectaculares vistas que dejan apreciar de manera única el Parque Natural del “Massís del Garraf”.

9. Can Batlle House

En este caso, descubrimos que Can Batlle House fue todo un proyecto que empezó gracias a la magia del amor. Helena e Ignasi vinieron de Barcelona al Alt Penedès y se quedaron completamente encantados con las tierras que aquí descubrieron.

La vida de nuestros dos protagonistas dió un giro radical que hizo que acabaran siendo propietarios de una finca familiar. Helena había sido trabajadora de administración y atención al público, pero las viñas hicieron que cambiara para así dedicarse totalmente a la tierra.

De esta manera, presenciamos un ambiente totalmente inundado de generosidad, alegría y energía que no se acaba nunca. Se nota como la pasión de Helena por los viñedos es tan fuerte que se ve reflejado en los resultados de todo el trabajo que se lleva a cabo.

10. Artcava

Artcava es más que un proyecto, es un secreto que no mucha gente conoce. Además, se encuentra a tan solo 40 minutos en coche de la ciudad de Barcelona. Gracias a la agrupación de tres socios se consigue recuperar y montar la bodega de los padres de uno de ellos.

Como resultado de todo esto se llevó a cabo su “Cava Gran Reserva”. Actualmente, se elaboran unas 18.000 botellas cada año de cavas. Este producto se produce totalmente de manera artesanal, es más, si alguien quiere consumir uno de sus productos va a tener que espabilarse para comprarlo en la bodega mismo, ya que no hay otra forma de adquirirlo.

11. Carol Vallès

En Carol Vallès encontramos la vivienda de una pareja que adquirió la antigua masía familiar que sus abuelos habían conseguido hace ya más de 100 años. Aquí, en Can Parellada, encontramos una bodega fundada en el año 1996.

Actualmente, se encuentra en manos de la segunda generación, la cual siempre se ha presentado con mucha pasión y trabajo por lo que se hace. En este caso, siempre se tiene en cuenta preservar la historia, dado que esta ha optado por tener un gran compromiso con la tierra y su sostenibilidad, es por esto que te invitamos a una visita o tour por las bodegas de Barcelona.

12. Mas de la Sala

En esta ocasión vamos a viajar hasta la comarca del Bages para encontrar el Mas de la Sala. Vamos a situarnos en el medio de Geoparc Mundial Unesco de la Catalunya Central, dado que es donde situamos el origen de esta finca familiar.

Lo que más se da es un respeto hacia todo aquello relacionado con la tierra en la que se ubican, en concreto, tanto la cultura como las tradiciones que puedes encontrar en el Bages. Este territorio tiene mucha historia, ya que ha conseguido pasar y superar la filoxera de la misma manera que el abandono de las viñas para sembrar cereales a causa de la industrialización.

Gracias al impulso que obtuvo en el año 1994 podemos contemplar el gran cambio que actualmente aún se conserva. Además, nunca ha perdido su intención de proteger el medio ambiente así como la igualdad entre personas de distinto género, origen y capacidades.

13. Caves artium

En este caso es importante reservar un espacio para hablar sobre la Bodega Cooperativa de Artés (Caves artium), ya que formó parte de un movimiento de cooperativas de consumo y sindicatos agrarios entre el siglo XIX y el XX. Además, fue la primera cooperativa en todo el Estado Español que en el 1949 empezó a hacer cavas.

Esta bodega tiene una historia que ha ido desarrollándose a lo largo de los años hasta el día de hoy. Por este motivo, gracias a la tradición vitivinícola que se ha ido conservando su personalidad nunca se ha perdido.

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